miércoles, 8 de septiembre de 2010

FAMILIAS MAYAS
La familia lingüística maya consiste de cinco su-familias e incluye muchas lenguas que se hablan en México, Guate mala, y Balice. En México, las lenguas mayas se hablan en siete estados de la república: Chiapas, Tabasco, Yucatán, Quintana Roo, Campeche, San Luis Potosí y Vera cruz. En Chiapas, todas las lenguas son mayas (excepto el zoque), al igual que casi todas las lenguas indígenas de Guatemala. (Los mapas siguientes muestran la distribución aproximada de estas lenguas, tomando en cuenta algunas migraciones recientes.) El número de hablantes de las lenguas mayas es más de 1 millón y medio, y es así como esta familia es una de las dos más grandes de México. (La otra es la familia náhuatl.)


Las cinco subfamilias de la familia maya son:
Sub-familia ch'ol-tzotzil
Sub-familia huasteca
Sub-familia yucateca
Sub-familia chujeana-kanjobal
Sub-familia quicheana-mameana

Hay muchas ruinas de la civilización maya antigua en los estados de Chiapas y Yucatán, y también en Guatemala. Estos sitios arqueológicos y los artefactos descubiertos en ellos muestran un sentido estético muy avanzado: en escultura de piedra, cerámica, piezas fundidas de metales preciosos, mosaicos, y la talla de cristal y jade—todos producidos sin herramientas metálicas. Los Mayas ya habían inventado el símbolo abstracto del cero para simplificar las matemáticas mucho tiempo antes de que se usara en Europa, y el calendario maya fue más antiguo y eficiente que el calendario juliano que usaban los españoles que conquistaron México.

Durante los años cincuenta, se podía distinguir el origen de la gente por la ropa característica de los hombres y las mujeres. Actualmente, muchos compran su ropa en tiendas, sobre todo los hombres. Las mujeres en regiones altas prefieren la ropa tradicional con sus faldas largas hechas de lana de sus propias ovejas. Algunos de sus rebozos también eran hechos de lana, los cuales les daban a ellas y a sus bebés mucha más protección en los días fríos.

La dieta típica de los mayas consiste de maíz, frijoles y calabaza. Algunos cultivan jardines pequeños cerca de sus casas donde plantan col, rábano y otras verduras. Mucha gente maya no tiene suficiente terreno para cultivar el maíz necesario para sus familias, ni tienen tampoco bastante tierra forestada de donde obtener leña, así que buscan tierra dondequiera pueda. Especialmente los tzeltales aumentaron su territorio durante la segunda mitad del siglo XX, migrando a la selva lacandona en el este de Chiapas.

Muchas lenguas de esta familia suelen tener palabras largas y complejas, con muchos prefijos y sufijos. Por ejemplo, ‘el maestro’ en el tzotzil es li jchanubtasvaneje; esta frase contiene las siguiente piezas: li ‘el, la’, j ‘agente humano’, chan ‘aprender’, ub ‘llegar a ser’, tas ‘causativo’, van ‘habitualmente’, ejnominalizador’ y e ‘fin de frase’. Así que, el sentido literal de esta palabra es ‘alguien que habitualmente hace aprender algo (a alguien)’.

Un rasgo distintivo de las lenguas mayas es su uso de consonantes glotalizadas. Éstas se forman al cerrar las cuerdas vocales durante una consonante como p, t, o c (k); la laringe se levanta, produciendo presión extra que resuelta en un taponazo después de la consonante cuando la presión es soltada por los labios o la lengua. (Ver el diagrama de los órganos principales de articulación.) Usualmente, la globalización se escribe con una comilla después de la consonante. Por ejemplo, en el tzeltal, hay tres consonantes glotalizadas en la frase c'ux c'ajc'al, que significa ‘hace calor’, o literalmente, ‘el sol/día causa dolor’.

FAMILIA ZAPOTECA

Las lenguas zapotecas se hablan en el estado de Oaxaca, principalmente en las valles centrales, hacia la costa Pacífica en el sur, hacia el istmo de Tehuantepec en el sureste, y por la Sierra de Juárez en el noreste.

La familia zapoteca es una de las familias más grandes del tronco otomangue en el número de hablantes. También tiene más variantes locales que cualquier otra familia en el tronco otomangue (excepto posiblemente la familia mixteca). Se compone de dos subfamilias lingüísticas: el chatino y el zapoteco. El chatino cuenta con siete variantes importantes, todas habladas en Oaxaca. El zapoteco es una subfamilia grande (posiblemente 40 variantes recíprocamente ininteligibles) en los estados de Oaxaca y Veracruz. El personal del Instituto Lingüístico de Verano ha hecho investigaciones en cuatro de las variantes del chatino y en más de veinticinco de las variantes del zapoteco.

Los zapotecos y los chatinos eran tradicionalmente agricultores, y la mayoría todavía lo son; pero actualmente algunos pueblos son conocidos por otras cosas. Por ejemplo: los zapotecos de Teotitlán del Valle, Oaxaca, son conocidos en otros países por sus tapetes y otras artesanías de lana; y su pueblo cerca de la carretera panamericana es una importante atracción turística. Los zapotecos de la región del istmo viajan al norte para vender su joyería de oro hecha a mano, sus canastas de palma, artesanías bordadas, totopos (sus tortillas especiales), pescado seco y camarones. Regresan con cosas que no tienen en su región, como algunas frutas y legumbres.

Probablemente había gente de habla zapoteca entre los que construyeron las famosas ruinas de Monte Albán, aunque el sitio es más conocido por los fabulosos tesoros descubiertos en las tumbas de reyes mixtecos enterrados allí en una época posterior.

Uno de los presidentes más famosos de México, Benito Juárez, fue zapoteco. Muchas veces ha sido comparado con el presidente Abraham Lincoln de los Estados Unidos, y su apotegma inmortal es: “Que el pueblo y el gobierno respeten los derechos de todos. Entre los individuos, como entre las naciones, el respeto al derecho ajeno es la paz”.

Igual que en otras lenguas del tronco otomangue, el orden normal de las palabras en las lenguas zapotecas es: Verbo - Sujeto - Complemento. Los numerales preceden a los sustantivos que modifican, pero otros modificadores y posesores los siguen. Hay un juego especial de pronombres dependientes que a primera vista parecen ser sufijos en los verbos (indicando el sujeto) o en los sustantivos (indicando un posesor), parecidos a los sufijos de persona y número en español. Sin embargo, gramaticalmente se consideran como sujeto o posesor, porque no se usan cuando se encuentra un sustantivo aparte después del verbo que funciona como sujeto o posesor.

Igual que las otras lenguas otomangues, casi todas las lenguas zapotecas son lenguas tonales; es decir, el tono con que se pronuncia una palabra es de tanta importancia que al cambiarlo, puede también cambiar el significado de la palabra a otro completamente distinto. Sin embargo, los tonos no se marcan en las ortografías prácticas (alfabetos) porque los tonos correctos de una palabra usualmente pueden determinarse por contexto. Todas las lenguas zapotecas tienen una distinción llamada “fortis/lenis” (fuerte/suave) en muchas consonantes. Las consonantes fortis generalmente son más largas que las lenis; muchas consonantes fortis son sordas, p. ej.: p, t, k (c/qu), mientras las consonantes lenis correspondientes tienden a ser sonoras, p. ej.: b, d, g; y a veces hay otras diferencias en su pronunciación. Esa distinción generalmente sí se marca en las ortografías prácticas. Las lenguas zapotecas también muestran modificaciones llamadas “laringeales” en las vocales. Además de vocales normales, la mayoría de las lenguas zapotecas tiene vocales “cortadas” y vocales “laringealizadas” (a veces llamadas “quebradas”). Las cortadas tienen una terminación abrupta al final de la vocal, por medio de cerrar las cuerdas vocales. Las laringealizadas se hacen o con una breve pausa en medio de la vocal, o pronunciándola con una voz rasposa.

FAMILIA TOLTECA
El concepto de familia tolteca está claramente visible en la palabra náhuatlcencalli” donde –cen- significa “enteramente juntos” y calli –casa-. De donde se desprende que cencalli significa “la casa grande de los que viven enteramente juntos”.
Otra palabra que nos permite entender la dimensión de familia tolteca es, -cenyeliztli- entendida como “estado o naturaleza de quienes viven entera y conjuntamente”. Finalmente, para entender el concepto de familia necesitamos recordar el vocablo –calpulli-, que significa “gran casa”, lo que implica un conjunto de familias que viven entera y conjuntamente. La familia representa el núcleo fundador de la conciencia del individuo, el segundo será la comunidad. Esta es la razón por la cual la esencia de la educación surge en el seno materno. El padre y la madre tendrán como objetivo sustantivo la educación de los hijos, en el Códice Matritense del Real Palacio, tomamos estas descripciones:
El padre de gentes todo lo cuida,es compasivo, se preocupa,de él es la previsión,él es el que da apoyo,
con sus manos protege.Cría, educa a sus hijos,los enseña, los amonesta,les muestra cómo han de vivir.Les pone delante un gran espejo,los hace verse en un espejo de dos caras.Es como gruesa tea que no ahuma.
La madre de familia:tiene hijos, los amamanta.Su corazón es bueno, vigilante,diligente, cava la tierra,
tiene ánimo, vigila.Con sus manos y su corazón se afana,educa a sus hijos,se ocupa de todos, a todos atiende.Cuida a los más pequeños.A todos sirve,se afana por todos, nada descuida,conserva lo que tiene,
no reposa.
Como se observa el atributo principal de ser padre o madre es la educación de los hijos. En efecto, los niños eran amados y queridos por la familia, los parientes y la comunidad. Desde el mismo momento del nacimiento comenzaba una serie de ceremonias con discursos ancestrales, en donde se recordaban, una y otra vez, los valores y principios.
“La educación del niño empezaba el día de su nacimiento con discursos por parte de los padres y familiares que predecían su destino. Aunque considerados como adultos pequeños y ciudadanos con todos los derechos desde el momento del nacimiento, los niños eran tratados con gran afecto y eran llamados “joyas sin precio” o “plumas preciosas”.
La educación doméstica, que empezaba después del destete, a los tres o cuatro años, tenía como propósito inducir al niño las técnicas y obligaciones de la vida adulta tan pronto como era posible. Un mundo en el que el trabajo manual era común a todos, ofrece al niño la oportunidad de participar en actividades adultas mucho más tempranamente que, por ejemplo en nuestra cultura mecanizada. Los padres supervisaban el entrenamiento de los niños y las madres instruían a las mujeres.
Hasta los seis años escuchaban frecuentes y repetidas homilías y consejos, aprendían el uso de los implementos caseros y hacían trabajos domésticos.
Los sueños recibían trabajos pronto podía encaminar y a un infante se le hacían cargar pequeños pedazos de manera; con el tiempo el peso iba creciendo y aumentaba la ayuda que prestaban en las labores domésticas llevando agua y leña, arribando el fuego y barriendo. En la casa la educación estaba dividida de acuerdo con el sexo: el padre enseñaba al hijo sus deberes, mientras la madre instruían a la niña en la molienda de maíz, en hacer tortillas y en el tejido de la ropa.
Los niños aztecas eran constantemente apremiados con prolongados discursos acerca de su destino y sus deberes morales y éticos.” Max Shein, El Niño Precolombino. Méx. 1986.
El respeto a los padres y abuelos, así como a los hermanos mayores, la relación con la familia ampliada, es decir, tíos, tías, parientes políticos, pero sobre todo, con los padrinos, que tenían en varias etapas de su niñez y juventud, un “compromiso” con la educación del ahijado, resultaban fundamentales en el desarrollo educativo del niño.
Los niños eran inmediatamente integrados, como miembros muy valiosos, a la vida social y familiar. Existía un sentido total de respeto por el infante, tanto por un valor cultural admitido plenamente de manera comunitaria, como por una Pléyade de seres humanos integrados por padres, abuelos, padrinos, tíos, que lo respaldaban. En este núcleo era donde se formaban los valores, principios y actitudes, que regirían el resto de su vida. La educación en el hogar era práctica y por imitación. El ejemplo del núcleo familiar era básico, comenzando por los padres.
Los padres enseñaban a sus hijos varones, a temprana edad, a cumplir con todas las obligaciones masculinas con el hogar y con la comunidad. Además de incorpóralos a los trabajos que realizara el padre, como la agricultura, la cerámica, la caza y pesca, etc., se suman las actividades comunitarias, como los trabajos agrícolas colectivos, la construcción y reparación de templos, edificios públicos, canales, caminos, puentes, etc. Las madres disciplinaban a sus hijas en las tareas del hogar. Aprendían a temprana edad a hacer tortillas, bordar, tejer e hilar, a lavar y mantener escrupulosamente limpia la casa. Así como las tareas comunitarias como limpiar los templos y edificios públicos, preparar los alimentos para los dignatarios, funcionarios y visitantes, así como colaborar en la preparación de las comidas comunitarias.
Además el niño está plenamente incorporado a la vida familiar, social y comunitaria. Fuera en las fiestas familiares, de su calpulli o las de la comunidad, religiosas o profanas, en ningún espacio el niño anahuaca estorbaba o estaba de más. Razón por la cual, los niños conocían los rituales religiosos y profanos. Otra de las características de esta educación, era que los infantes aprendían a sentirse útiles y a participar en las responsabilidades familiares. La crianza de los niños en el hogar, era un orgullo y una gran responsabilidad. Las madres amamantaban a los niños hasta los tres o cuatro años.

FAMILIA MIXTECA

La familia mixteca, una de las familias más grandes y diversas en el tronco otomangue, se divide en tres grupos: el mixteco (Mixtec), el cuicateco (Cuicatec) y el triqui (o trique). Estas lenguas se hablan mayormente en la parte occidental del estado de Oaxaca, pero el mixteco también se habla en las partes colindantes de los estados de Puebla y Guerrero.

El cuicateco y el triqui tienen pocas variantes, pero el mixteco es en sí una subfamilia que comprende muchas variantes. En realidad, cada pueblo tiene su propia variante, con rasgos algo distintos de los rasgos de los pueblos colindantes. La identidad social se basa en el pueblo, no en la región, ni en un grupo lingüístico. El hecho de que las mujeres de cada pueblo tienen un traje distintivo es una muestra de ello. Por esta razón es difícil contar los dialectos del mixteco. El Instituto Lingüístico de Verano ha hecho investigaciones en más de 25 variantes.

La gente de los pueblos colindantes pueden entenderse entre sí bastante bien, pero la gente de los pueblos que se encuentran a más de un día de camino generalmente no pueden. Una razón es que varios cambios de sonido han afectado diferentes partes de la región Mixteca. Por ejemplo, la mayoría de los pueblos en la parte suroeste de la región tiene la consonante s en muchas palabras, mientras que la mayoría en el noreste tiene la consonante d suave (el sonido de lado en español) en las palabras correspondientes. Así que la palabra ‘venado’ es isu en una parte y idu en la otra, y la palabra ‘metate’ es yoso en una parte y yodo en la otra. (Algunos pueblos usan otras consonantes más en las mismas palabras.) Otra razón que dificulta a la gente de diferentes pueblos entenderse es que a veces usan palabras completamentedistintas. Por ejemplo, los pronombres que se usan en cada pueblo muchas veces son diferentes que los pronombres en pueblos colindantes.

El área donde viven los mixtecos, cuicatecos y triquis se llama la Mixteca, y comprende tierra fría, tierra templada y tierra caliente. Originalmente tenía suelos fértiles, pero algunas partes han sufrido mucha erosión; es muy difícil ganarse la vida sembrando maíz, frijol y calabaza de la manera tradicional. Una manera en que los mixtecos aumentan sus ingresos es en el tejido de la palma; fabrican sombreros, petates (esteras) y tenates (cestos), pero ganan muy poco. Las mujeres triquis aumentan sus ingresos vendiendo a los turistas textiles que fabrican en un telar de cintura. Algunas mujeres en Peñoles todavía cultivan gusanos de seda y venden el hilo en la ciudad de Oaxaca; algunos hombres hacen carbón y lo venden en el mercado en Oaxaca.

Otra respuesta a la presión económica es la emigración, y muchas personas de la Mixteca viven y trabajan en el Distrito Federal, en Oaxaca y en otras ciudades de la República Mexicana. Generalmente mantienen lazos con su pueblo natal, regresan cada año para las fiestas y contribuyen a las obras públicas para el beneficio del pueblo. Muchas personas van a los estados de Sinaloa, Sonora y Baja California para trabajar en las grandes empresas agrícolas que se encuentran allí. Otros van a los Estados Unidos y a Canadá.

Se sabe mucho acerca de la historia de los mixtecos por medio de sus libros pictográficos, que se llaman códices. Estos códices presentan su cosmovisión, y también la historia de algunos de sus reyes. Uno de los reyes más famosos fue Ocho Venado Garra de Tigre, del pueblo de Tilantongo, quien reinó sobre un imperio grande en los siglos once y doce. Los mixtecos tenían fama de ser orfebres, alfareros y artesanos de mucha destreza. El grupo más conocido de objetos mixtecos fue encontrado en la tumba siete del sitio arqueológico de Monte Albán en Oaxaca.

Igual que las otras lenguas otomangues, las lenguas de la familia mixteca son lenguas tonales; es decir, el tono con que se pronuncia una palabra es de tanta importancia que al cambiarlo, puede también cambiar el significado de la palabra a otro completamente distinto. Los tonos son tan importantes que se escriben en las ortografías prácticas (alfabetos) de muchas lenguas mixtecas, por lo menos en unas palabras. El triqui de Chicahuaxtla fue la primera lengua en que se descubrió un sistema con cinco niveles de tono; este sistema fue presentado por Robert Longacre en 1952. Además, los tonos pueden cambiar a otros antes o después de otro tono. La descripción de estos cambios en el mixteco de San Miguel El Grande por Kenneth Pike fue una de las primeras de este fenómeno, que se llama el “sandhi” tonal.

Igual que con otras lenguas en el tronco otomangue, el orden normal de las palabras en las lenguas mixtecas es: Verbo - Sujeto - Complemento. Los numerales preceden a los sustantivos que modifican, pero los posesores y otros modificadores los siguen. Hay un juego especial de pronombres dependientes que a primera vista parecen ser sufijos en los verbos (indicando el sujeto) o en los sustantivos (indicando un posesor), parecidos a los sufijos de persona y número en los verbos en español. Sin embargo, gramaticalmente se consideran como sujeto o posesor, porque no se usan cuando se encuentra un sustantivo aparte después del verbo que funciona como sujeto o posesor.

Variantes especificas de la familia mixteca
Nombres
(algunos tienen enlaces con más información) Códigos del Ethnologue
Cuicateco de Tepeuxila cux

Cuicateco de Teutila cut

Mixteco de Alacatlatzala mim

Mixteco de Alcozauca xta

Mixteco de Amoltepec mbz

Mixteco de Apasco/Apoala mip

Mixteco de Atatláhuca mib

Mixteco de Ayutla miy

Mixteco de Cacaloxtepec miu

Mixteco de Chayuco mih

Mixteco de Chazumba xtb

Mixteco de Chigmecatitlán mii

Mixteco de Coatzospan miz

Mixteco de Cuyamecalco xtu

Mixteco de Diuxi-Tilantongo xtd

Mixteco de Huitepec mxs

Mixteco de Itundujia mce

Mixteco de Ixtayutla vmj

Mixteco de Jamiltepec mxt

Mixteco de Juxtlahuaca vmc

Mixtec de Magdalena Peñasco
xtm

Mixteco de Metlatónoc mxv

Mixteco de Mitlatongo vmm

Mixteco de Mixtepec
mix

Mixteco del norte de Tlaxiaco
xtn

Mixteco del noroeste de Oaxaca mxa

Mixteco de Ocotepec mie

Mixteco de Peñoles mil

Mixteco de Pinotepa Nacional mio

Mixteco de San Juan Colorado mjc

Mixteco de San Juan Teita xtj

Mixteco de San Miguel el Grande mig

Mixteco de San Miguel Piedras xtp

Mixteco de Santa Lucía Monteverde mdv

Mixteco de Santa María Zacatepec mza

Mixteco de Silacayoapan mks

Mixteco de Sindihui xts

Mixteco de Sinicahua xti

Mixteco del sudeste de Nochixtlán mxy

Mixteco del sur de Puebla mit

Mixteco del sudoeste de Tlaxiaco meh

Mixteco de Soyaltepec vmq

Mixteco de Tacahua xtt

Mixteco de Tamazola vmx

Mixteco de Tezoatlán
mxb

Mixteco de Tidaá mtx

Mixteco de Tijaltepec xtl

Mixteco de Tlazoyaltepec mqh

Mixteco de Tututepec mtu

Mixteco del oeste de Juxtlahuaca jmx

Mixteco de Yoloxóchitl xty

Mixteco de Yosondúa mpm

Mixteco de Yucuañe mvg

Mixteco de Yutanduchi mab

Triqui de Chicahuaxtla trs

Triqui de San Juan Copala


FAMILIA TEOTIHUACANA

La cultura teotihuacana corresponde al horizonte clásico, durante éste aparecen las sociedades urbanas, en grandes asentamientos con centros ceremoniales de arquitectura monumental, planificados y orientados con todo cuidado, que indican el auge del régimen teocrático; o sea, que la clase sacerdotal dominaba las actividades religiosas y organizaba la producción y la distribución de los bienes, así como el intercambio a grandes distancias de la rica producción de artesanías. La ciudad de Teotihuacan se empezó a construir hace más de 2 000 años y las obras duraron aproximadamente un siglo. Se convirtió en el centro económico, religioso y político más urbanizado. En su época de esplendor, del 200 a. C. al 750 d.C., tenía una extensión de 20 km2, una población de alrededor de 100 mil habitantes y a lo largo de nueve siglos se desarrollaron ciencias como la astronomía, las matemáticas y el calendario y florecieron la arquitectura, la escultura, la pintura y la cerámica. Lucía grandes pirámides y templos pintados de rojo; murales con pinturas de animales fantásticos y sacerdotes en procesión pintados de amarillo, azul, verde, rojo, rosa y negro. Estas obras indican la existencia de una organización social, económica, política y religiosa muy desarrollada.
La ciudad de Teotihuacan se distingue por la rectitud de sus calles; tenía un sistema de abastecimiento de agua potable y otro de drenaje interno que incluía una vasta red de canales subterráneos que confluían en un canal central. La magnitud y grandiosidad de sus pirámides del Sol y de la Luna, la llamativa decoración del templo de Quetzalcóatl, sus construcciones administrativas y públicas a lo largo de la Calzada de los Muertos y la existencia de barrios de especialistas y de extranjeros, la convirtieron en una gran obra de ingeniería, y en el modelo que otros pueblos copiaron.
Alrededor del área central se encontraban los conjuntos habitaciones que albergaban a varias familias que practicaban el mismo oficio, cada familia disponía de un espacio para la preparación y el consumo de alimentos, para dormitorios, para almacenamiento, para el culto, otros destinados al desecho y otro para actividades comunes de la familia relacionadas con el oficio, ya fueran ceramistas, tejedores, pintores, etcétera.
Teotihuacan era una ciudad multiétnica y cosmopolita porque en ella vivían extranjeros y tenía relaciones políticas con diversos lugares de Mesoamérica como Monte Albán, Kaminaljuyú, Tikal y otros lugares que hoy se encuentran en Puebla, Tlaxcala y Morelos. Fue el centro sagrado de peregrinación más importante de su época y ejercía un dominio político y económico en toda la región.
Los teotihuacanos fueron buenos para la explotación, el trabajo y la venta de obsidiana. El comercio se realizaba mediante el intercambio de productos o trueque; de esta forma obtenían alimentos y artículos de otras regiones como cacao, miel, piedras preciosas, plumas de quetzal, algodón, etcétera.
Algunos especialistas afirman que el esplendor de Teotihuacan declinó debido a un incendio que atribuyen a rebeliones de campesinos, o aun sobrepoblamiento que originó escasez de alimentos; otros piensan que importantes ciudades dominadas por los teotihuacanos, como Tula, se fortalecieron y se independizaron, dejando de pagar tributo, lo que debilitó a la metrópoli, pero todo queda en el terreno de las hipótesis.
Las necesidades y las costumbres alimentarias de los pueblos van de acuerdo con los recursos que encuentran en el medio donde viven. La tierra, el agua, los animales y vegetales del lugar conforman su medio natural y originan sus costumbres de alimentación.
Los pueblos mesoamericanos, al establecerse en lugares con gran variedad de flora y fauna tuvieron una alimentación rica, variada y suficiente. Elaboraban de diferente manera los productos que cultivaban, pescaban y cazaban y tenían un excelente paladar.

FAMILIA OLMECA

Los olmecas estaban organizados en tribus dirigidas por un solo jefe llamado Chichimecatl.
Su gobierno era teocrático, porque estaban dirigido por sacerdotes.
Tenían un tipo de organización comunitario conocido como "ciudad dispersa", en la que cada comunidad o granja estaba dirigida por un rey o sacerdote y en ella vivían algunas familias, cerca de las milpas.
El pueblo se encargaba de la construcción de los centros ceremoniales, que estaban rodeados por las aldeas de campesinos, quienes se encargaban del cultivo de la tierra, mientras que las mujeres elaboraban figuras y utensilios de barro, tejían telas y cuidaban a los hijos.
Los olmecas destacaron por su arte escultórico en el que sobresale el volumen, o sea la imagen tridimensional, la masa y peso, las estructuras en forma geométrica, las superficies redondeadas y una excelente proporción armónica.
Trabajaron el barro, el jade y la piedra en forma maravillosa. Tallaban desde pequeñas figuras en jade, hasta enormes rocas en las que esculpían cabezas de piedra, altares y columnas labradas en rocas que traían desde muy lejos, probablemente haciéndolas rodar sobre troncos de árbol.
Entre sus principales obras destacan por supuesto las monumentales cabezas de piedra que pesan más de cuarenta toneladas, talladas en grandes piedras y cuyas caras tienen rasgos negroides, las mejillas llenas, los ojos almendrados, la nariz amplia y los labios carnosos y grandes. Todas tienen en la cabeza como cascos con protectores en las orejas.
También se han encontrado grandes, estelas, es decir rocas verticales, en donde se presentan grabados de hombres llevando niños en las manos o rostros humanos saliendo de las fauces de un jaguar, hombres desnudos en posición sentada o descansando sobre sus rodillas. Todas ellas curiosamente llevan casco, pectoral y collares también tallados.
Las esculturas humanas tienen expresiones diferentes que denotan alegría, tristeza o enojo. Una de las más famosas es la estatua del luchador, encontrada en Uxpanapan, Veracruz o la del pensador.
También son típicas de los Olmecas, las esculturas pequeñas con cara de niño y las de enanos, que eran considerados seres superiores.
La cerámica, fue otro de sus grandes artes, la utilizaban en forma doméstica, es decir para uso en sus casas. Los platos y vasijas eran decorados con figuras geométricas o cabezas de animales y utilizaban varios colores para pintarlos. Su cerámica era negra y gruesa, a veces con manchas blancas, naranjas o amarillenta. Fabricaron tecomates, botellones y vasijas.
El arte textil también fue muy importante en de desarrollo de los olmecas, utilizaban algodón y aprendieron a cultivarlo en grandes cantidades. Aprendieron a tejerlo y a elaborar preciosas telas y adornos.
El final de la Cultura Olmeca, como de muchas otras culturas es desconocido, ya que no hay evidencia de que fueran invadidos por los enemigos o los conquistadores españoles.
Sin embargo, los restos encontrados de sus civilización hacen pensar que fueron ellos mismos los que destruyeron sus templos y casas, antes de que su población se dispersara.
Los olmecas, o "habitantes del país del hule", formaron la primera gran cultura mesoamericana y alcanzaron un gran desarrollo; llevaban y traían diferentes mercancías para intercambiar, entre ellas el hule de Tabasco y Veracruz. A partir del comercio y las expediciones, muchos avances de los olmecas se extendieron por toda Mesoamérica, en lugares apartados como Guerrero, el Valle de México, Oaxaca y la zona maya. Al pasar por otras comunidades, enseñaban lo que ellos sabían, por lo que se le reconoce como "Cultura Madre", pues las demás basaron parte de su desarrollo en ella.
Gracias a los ríos de su área geográfica los olmecas desplazaron sus productos con facilidad. Las enormes piedras que utilizaron para sus esculturas y edificios eran deslizadas sobre balsas por medio de las corrientes. Los olmecas desarrollaron una relación comercial muy estrecha con el valle de Oaxaca, la cual fortaleció a las elites zapotecas y facilitó el desarrollo de Monte Albán.
Los olmecas fueron agricultores, comerciantes, artistas y grandes constructores. Trabajaron el barro y la piedra. Tallaban desde pequeñas figuras de jade hasta enormes cabezas de piedra, de más de dos metros de altura, esculpidas en rocas que traían de muy lejos. El ajuar doméstico incluía vasijas de cerámica, metates de piedra, petates, canastos y telas para vestir, elaboradas con hilos de algodón o de fibras ásperas como las de la lechuguilla o la yuca.

La población vivía en aldeas en torno al centro ceremonial dentro del cual residían los sacerdotes y gobernantes con sus familias. Los monumentos olmecas son impresionantes. Los olmecas crearon los principios de un urbanismo ceremonial, iniciaron el desarrollo del calendario con los conocimientos astronómicos que lo fundamentan y establecieron una escritura figurativa. Se piensa que ellos iniciaron los conocimientos de la numeración, del calendario y de la escritura, como se observa en varios de sus monumentos y esculturas.
La sociedad estaba compuesta por distintos grupos; mientras unos cultivaban, otros gobernaban u organizaban ritos para el culto a los dioses. Las necesidades de aquella sociedad estratificada hicieron necesario que algunos administraran la producción, impulsaran el comercio y dirigieran las obras monumentales. Los individuos que dirigían los servicios religiosos conjugaban asimismo el poder político pues poseían conocimientos esenciales sobre el calendario y el momento preciso de la siembra.
Entre los años 500 y 400 a.C., los olmecas tuvieron dificultades y del año 300 a.C. al 200 d.C. su cultura se desintegró; esto llevó a la transformación de algunos lugares y a la constitución de otros con las nuevas culturas que se estaban formando. En los valles de Oaxaca y México empezaron a destacar villas que más tarde dieron origen a centros urbanos importantes.

Los olmecas fueron muy inteligentes y cultos, aprendieron a observar el cielo y con ello lograron establecer un calendario muy preciso que contemplaba la duración del año, el mes lunar, el ciclo agrícola y las fechas de las ceremonias religiosas que realizaban.
Tenían un sistema de escritura de jeroglíficos e ideográfica, es decir que por medio de dibujos daban a entender alguna idea.
A pesar de que en la zona en que habitaban no existían grandes piedras para hacer pirámides, la construcción de columnas, edificios, templos, esculturas y plazas no fue nada fácil porque el traslado de piedras se hacía desde muy lejos y se piensa que las colocaban sobre troncos de árbol que iban rodando kilómetros y kilómetros, sobre un terreno nada fácil o por medio de canoas construidas también con troncos de árbol.
Lo más notable es que muchas de las construcciones fueron elaboradas con barro y lo trabajaban de tal forma que aún en la actualidad existen restos de ellos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario